Titulo
de la pintura: Virgen del Canciller Rolin
Periodo
del arte: medieval –gótico
Año:
1435
Autor:
Jan Van Eyck
Contexto histórico
de la pintura:
Igualmente
es importante mencionar que la obra “La virgen del Canciller Rolin” representa
una escena propia de la vida y época en que se pintó, pues como se mencionó
antes es un claro retrato del canciller quién encargó la obra, haciendo
devoción a la Virgen y al fondo se puede ver una clara representación de la
región de Borgoña. En la escena que representa la obra, aparte de la
importancia de la figura de la Virgen y el canciller Rolin , intervienen
elementos que dan gran realismo y detalle a la obra, se pude observar hermosos
trajes con finos bordados que llevan puesto los dos personajes principales de
la obra ( Canciller Rolin y la Virgen), también se evidencia una corona con
piedras preciosas que pone un ángel sobre la cabeza de la Virgen, la biblia que
carga el Canciller Rolin en sus piernas y detrás de la imagen de este último se
ve el detallismo y realismo por parte de Jan Van Eyck para pintar las columnas
del recinto. Aparece el factor económico de la época el cual se extrae de la obra,
y sugiere afirmar que las artes, la pesca y la agricultura eran fuentes
primordiales para el sustento económico de la época del Medioevo.[1]
Sin
duda el personaje del Canciller, es una figura perteneciente a la nobleza y el
pintor trata de adecuar la imagen física de la Virgen a algo superior que la
nobleza, algo divino y bello, al fondo de la pintura se dice que los dos hombres
que dan la espalda a la escena es el
pintor y su hermano que perteneciendo a una clase inferior que la del
Canciller, toman esa postura como una crítica a la nobleza y al poder político,
al cual realizan sus pinturas. Esta obra representa un verdadero elemento
simbólico a la política y a la religión de la época y ayuda a identificar el
respeto que poseían por la Virgen como se ve la actualidad con la iglesia
católica.
Contexto histórico
del autor:
Como
se mencionó anteriormente “La Virgen del Canciller Rolin” fue un encargo
precisamente del mismo Canciller como su nombre lo dice, al pintor Jan Van
Eyck con el objetivo de profesar el gran
culto que tenía por la Virgen. Era común en la Edad Media que la aristocracia
recurriera a los grandes pintores para que estos plasmaran escenas que los
duques, cancilleres y reyes deseaban donar a grandes museos. El gran gestor de
esta obra de arte Jan Van Eyck pertenecía a Maaseyck lo que hoy es Bélgica, vivió
entre los años 1390 y 1441.
“La maestría técnica
de Van Eyck para modelar figuras y objetos con luz y color y su detallada
representación de superficies y texturas resumen el estilo de un artista que
tomaron como modelo numerosas generaciones, a pesar de que la enorme perfección
de sus obras había puesto el listón muy alto a sus posibles seguidores”.[2]
Fue
en el año 1435 en el que realizara la obra “La Virgen del Canciller Rolin” que
se incluye entre el estilo flamenco del Gótico, el cual se caracterizó por el
uso del oleo como técnica de pintura; lo que permitía un mayor realismo,
sutileza, detalle y colorido al plasmar rostros y telas dentro de las obras. En
la pintura, el flamenco gótico se caracterizó igualmente por la reproducción de
escenas religiosas y la iluminación casi constante en las producciones artísticas
a diferencia del romanticismo etapa del arte previa al gótico donde la
oscuridad y el dramatismo jugaban un papel preponderante.[3]
Tema o argumento de la obra
La obra Virgen del
canciller Rolin
nos muestra a simple vista a un hombre el cual de cierta manera está haciendo
una reverencia a lo que la obra llama una virgen, a la cual se le está poniendo
una corona con unos detalles muy notorios y de gran agrado para el público, en
sus brazos carga al que con seguridad es el niño Dios el que concediéndole la
bendición ve de buena manera la visita que este que se supone que es Nicolás
Rolin, el donante, que de una u otra manera buscaba salvar su vida con la
bendición ya mencionada anteriormente, en un plano más amplio vemos que se
podían encontrar en una iglesia conmemorando el acto y más al fondo se puede
notar el paisaje que nos regala por supuesto
Jan van Eyck. En el cuadro aparecen cinco personas; la virgen, el
donante, el niño y los dos infantes del fondo -que se cree que son el artista y
su hermano- aparece también una especie de ángel que su finalidad probablemente
es la demostrar la santidad que tienen la virgen y por ende el niño, en cuanto
a los objetos es importante resaltar la biblia, la corona, la cruz que lleva el
niño en su mano. La escena que el autor quiso representar a petición del
donante es meramente religiosa en la cual es persona que hizo la petición se
encuentra en una postura de orante ante la sagrada presencia de la virgen y el
niño.
“Un hombre maduro
con las manos juntas se arrodilla en el reclinatorio ante la Virgen María. Un
ángel sostiene la corona de oro sobre la cabeza de la reina de los cielos con
el Niño Jesús sentado en su regazo como si fuera un trono. El niño lleva el símbolo
de su poder en la mano, la esfera imperial de cristal y con la otra está
bendiciendo al hombre arrodillado. La luz de la puesta del sol ilumina la
escena piadosa que es un recordatorio del más allá. Se incluye en el género de
donantes medievales.
A pesar de ello, nos
permanece ausente el esplendor terrenal: el manto del hombre, de brocado de oro
con adornos de visón, es más ostentoso que el manto rojo de la virgen. La
escena se desarrolla en un suntuoso palacio en un alto. Los arcos de la ventana
se abren a un paisaje montañoso a lo lejos, un río y los edificios de una
ciudad”.4
4http://www.blogseitb.com/arte/tag/la-virgen-del-canciller-rolin/
Función
y significado
La pintura no solo se hizo con
la finalidad decorar sino también de hallar una especie de bendición y salvación de su alma - Nicolas
Rolin-. Loss signos y símbolos que hacen que la obra sea de una comprensión más
facilitada para el lector son objetos tales como: la biblia en poder del
orante, la cruz en la mano del niño, el ángel al lado derecho de la pintura que
de una manera inconsciente muestra que a este lado es donde se encuentran los
sagrados o los omnipotentes –aquellos que van a conceder misericordia al
orante-,los códigos evidentemente son los visuales, porque por este medio es
atraído el público, la imagen que podemos observar es sin duda abstracta debido
a que aparece y un personaje poco común para nuestra realidad y un tanto
ilógico para nuestra cotidianidad, la imagen se desarrolló a través de la
semejanza porque tuvo lugar en ella tal vez un recuerdo o una alusión a los
sentimientos, el objetivo principal de
la obra es la búsqueda de la salvación del alma del donante ya que ilustra
notoriamente el momento en el que este individuo se acerca a los aposentos del
niño para establecer un lazo de entrega mucho más arraigado, la sensación por la
cual es atrapado el visor es por los colores que en esta se expresan, nuestra atención fue un
poco espontánea porque lo hicimos de la manera más natural posible, la
selección la centramos más que todo en el primer plano de la imagen, en el
campo de la percepción sí usamos los dos factores que son el de la memoria y el
de la imaginación. En el significado denotado se puede separar la obra en
varios planos de manera de importancia que es el señor implorando misericordia,
el otro es la parte en la que se encuentran ubicados y por último el paisaje
que se deja ver con un sol brillante que inclusive cae en forma de nostalgia,
mientras la forma connotada nos muestra el objetivo real y final por el cual se
está construyendo dicha obra.
Juicio
desde el autor
Nuestro juicio al autor es
totalmente positivo, porque sabiendo que su vida estuvo enmarcada desde chico por
el arte y a partir de su familia rodeado de muestras artísticas y pudiendo
citar “La admiración que despierta el artista flamenco Jan van Eyck no es algo
que nos sorprenda. Este artista, nacido en 1390, introdujo un realismo
innovador en los últimos años de la Edad Media, gracias al gran manejo que
tenía de la pintura al óleo. Al ver las obras de Van Eyck nos envuelve la
ilusión de realidad, generada por el gran detallismo y el buen empleo de los
colores y de la luz”.5
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5http://pensarlahistoriadelarte.blogspot.com/2012/02/jan-van-eyck-virgen-del-canciller-rolin.html
Juicio
desde la obra
Juicio positivo porque
apreciamos la belleza que el autor quiso plasmar en la obra y sobretodo el buen
manejo del óleo que le da forma, color e imprime realidad, da iluminación y
esto nos lleva a que si la obra en sí no es de nuestro gusto al menos podemos
resaltar el esfuerzo y el buen manejo de los materiales y los aspectos a
reconocer del artista que impuso en la obra.
CIBERGRAFÍA
·
http://www.reconquistaydefensa.org.ar/_estudios/edadmedia/em-i-0.htm
·
http://pensarlahistoriadelarte.blogspot.com/2012/02/jan-van-eyck-virgen-del-canciller-rolin.html
·
http://www.artehistoria.jcyl.es/genios/cuadros/1501.htm
·
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/v/van__eyck.htm
BIBLIOGRAFÍA
·
Manfred
Wundram; Mathias Weniger; Robert Suckale, Gótico,
Editorial Taschen, pág. 96.
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